Los Indios Camash se conocen como el primer asentamiento humano permanente en el lugar de la actual Barranquilla.
Entre 1627 y 1637, Nicolás Barros y de la Guerra, bisnieto de Pedro Barros I, segundo encomendero de Galapa, funda la hacienda San Nicolás de Tolentino a orillas del caño La Tablaza. En esta hacienda se vio en la necesidad de permitir a sus concertados libres que construyeran sus viviendas dentro de los limites de la misma, de tal manera que desarrollaran las faenas en el campo y ayudaran en la manutención de sus familias.
Después de la muerte de Nicolás Barros, la hacienda empezó a albergar a otro género de habitantes, las personas que por motivos de salud, edad, o por mantener una relación de Compadrazgo con el dueño de la hacienda, se les permitía vivir en dicha estancia. También habían indígenas provenientes de Malambo y Galapa.
Para 1681, la hacienda, era considerada un sitio, es decir un pueblo, y con sus zonas aledañas era conocida como Barrancas de San Nicolás.
Antes de 1700, el territorio correspondiente a Barranquilla había sido la capitanía Aguerra del partido de Tierradentro.
En 1772 fue erigida en corregimiento del mismo partido, con juez letrado.
En la época de la Independencia, Barranquilla se distinguió por su patriotismo.
En 1812, el general Pierre Labatut atacó y venció a los realistas que se encontraban el Sitioviejo, y Sitionuevo.
El 7 de Abril de 1813, fecha que se institucionalizó más tarde como el día de Barranquilla, el Presidente- Gobernador del Estado libre e Independiente de Cartagena, Manuel Rodriguez Torices, otorga a la población el título de villa de Barranquilla, capital del departamento de Barlovento o Tierradentro, en reconocimiento del valor y patriotismo del pueblo por su apoyo en la defensa de la independentista Cartagena de Indias en su lucha contra la realista Santa Marta.
El 10 de Octubre de 1821, fue expulsado el último reducto español de Cartagena de Indias, a la sazón, capital de estado soberano de Bolívar, al que pertenecía Barranquilla. Ese mismo año la villa tuvo su primer alcalde, Agustín del Valle, quien cumplió sus funciones en su propia residencia, la cuál fue convertida en el cuartel del Ejercito.
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